"Los ricos no solo tenían todo el dinero, sino también todas las oportunidades para obtener más; tenían todo el conocimiento y el poder, y así el hombre pobre estaba abajo y tenía que quedarse abajo."

Entendiendo esta cita

Aquí, Sinclair expone las desigualdades arraigadas que mantienen a los pobres empobrecidos. La riqueza engendra oportunidades, educación e influencia, creando un ciclo que es difícil de romper. La desesperación en esta cita subraya las barreras sistémicas que impiden la movilidad social y perpetúan las divisiones de clase.