Dale Carnegie, pionero en el desarrollo personal y la formación en habilidades interpersonales, enfatiza la crucial diferencia entre saber y hacer en esta cita. Basándose en su amplia experiencia enseñando a las personas cómo influir en los demás, Carnegie señala que simplemente entender las técnicas de venta no es suficiente; el éxito proviene de aplicar consistentemente este conocimiento en situaciones del mundo real. Este principio sigue siendo particularmente relevante en el entorno actual, rico en información, donde el acceso al conocimiento es abundante, pero la aplicación efectiva a menudo sigue siendo el factor diferenciador clave.